Historia del nylon: inventor y evolución
El nailon, nilón o nylon es el primer textil sintético creado por el ser humano. Gracias a sus extraordinarias características, su creación supone todo un hito histórico y la base de la industria textil moderna.
Primer textil sintético
En 1935, se fabrica el primer textil sintético que es al mismo tiempo la primera poliamida jamás producida. Su realización es el resultado de un estudio del instituto de investigaciones sobre la síntesis de los polímeros de cadena larga, fundado en 1929 por la compañía estadounidense Du Pont de Nemours.
Su director, Wallace Hume-Carothers, es profesor de química en la Universidad de Harvard, pero su equipo no es el único en orientar sus investigaciones hacia las fibras sintéticas. Muchos químicos, dispersos en múltiples laboratorios de Europa y Estados Unidos, han trabajado durante años en el tema de las materias primas para hilar de origen puramente químico.
Origen del nailon: la polimerización
En 1920, el químico alemán Hermann Staudinger estableció el principio de base que serviría, quince años más tarde, para la fabricación de las fibras sintéticas: la polimerización.
Este proceso de síntesis permite que unos compuestos constituidos por moléculas simples, los monómetros, se aglomeren por adición o condensación para formar moléculas muy grandes, los polímeros. Las largas cadenas de aspecto filiforme resultantes poseen la propiedad fundamental de formarse de un modo estrictamente ordenado, sin la menor heterogeneidad estructural.
Esta cualidad, junto con sus características de elasticidad y plasticidad, hace que los polímeros sean serios candidatos para la elaboración de fibras sintéticas. En 1953, Staudinger obtiene el premio Nobel por su descubrimiento y sus trabajos sobre los polímeros.
Quién inventó el nailon
El inventor del nylon es la empresa norteamericana Du Pont de Nemours en el año 1935. Este acontecimiento es el resultado de varios años de investigación. A partir de 1930, y partiendo de las investigaciones de Staudinger, las características de hilado de los polímeros en estado fundido son estudiadas por otros investigadores, en especial Charles M. A. Stine y su asistente Carothers en Du Pont de Nemours.
Ambos constatan que las propiedades de los cuerpos obtenidos son diferentes y, a menudo, complementarias de las de las fibras naturales. Los ejecutivos de Du Pont de Nemours consideran indispensable copar un área de investigación tan prometedora, aun cuando los resultados comerciales se ven todavía muy lejanos.
El objetivo de Du Pont de Nemours es elaborar una fibra cuyas características emulen las de la seda, o por lo menos se aproximen. La seda es una proteína, es decir, un polímero constituido por una cadena de aminoácidos. Pero como éstos no sirven para la condensación controlada, Carothers tiene que elegir otros monómeros.
Termina escogiendo la hexametilenodiamina y el ácido adípico. Su condensación produce un polímero con propiedades excepcionales: el nailon.
Las cualidades del nylon son muy conocidas: no se rompe, no se arruga, no se desgasta, es muy elástico y plástico; es absolutamente imputrescible, y es fácil de mantener y secar. Sin embargo, éstas no son las propiedades que Du Pont de Nemours destaca al comercializar, en mayo de 1940, las primeras medias de nailon.
Expansión y evolución del nailon
A partir del año 1945, la comercialización del nylon se reanuda y el éxito es tan espectacular que la nueva fibra textil casi elimina la seda del mercado occidental. Simultáneamente a los investigadores estadounidenses, los químicos alemanes crean otros tipos de poliamidas como el cloruro de vinilo sobredorado y luego la poliamida-6, que su inventor, P. Schlach, denomina perlón.
A principios de los años noventa, después de medio siglo de difusión, la variedad de fibras textiles sintéticas ha aumentado de forma considerable. El nailon ha conservado una importancia relativa en ciertas gamas de productos industriales (alfombras, neumáticos, artículos de pesca, cuerdas, paracaídas, etc.), pero su presencia pierde importancia en el sector del vestuario, en beneficio de otra fibra, de más fácil manutención aún: el poliéster.
Fuente: CurioSfera-Historia.com